LA ABUELA, Paco Plaza

 

LA ABUELA

Paco Plaza

Terror

2021

 

 

SINOPSIS:

 

Susana tiene que dejar su vida en París, donde trabaja como modelo, para regresar a Madrid, debido a que su abuela Pilar acaba de sufrir un derrame cerebral. Años atrás, cuando los padres de Susana murieron, su abuela la crió como si fuese su propia hija. Susana necesita encontrar a alguien que cuide de Pilar, pero lo que deberían ser solo unos días con su abuela se acabarán convirtiendo en una terrorífica pesadilla.

 

 

OPINIÓN PERSONAL:

 

Paco Plaza ha logrado con su trayectoria crear expectación ante el anuncio de un nuevo proyecto suyo,  especialmente si se trata de su género fetiche y el que le encumbró como director: el terror.

Es imposible que su nombre no evoque a su primer gran éxito Rec, conjuntamente de la mano de Balaguero en 2007 y su posterior secuela. Personalmente me parece una genialidad lo que hizo con su tercera parte, ya en solitario en la dirección, y más recientemente nos regaló una de las mejores películas del género de los últimos años: Verónica. Justamente me ha parecido ver mucho de ella aquí. Es un director con un estilo y una marca ya reconocibles y aquí lo vuelve a demostrar.

Ya centrándonos en su nueva película, tengo que admitir que en su comienzo se haya su mayor debilidad y se encuentra justo en su escena inicial. Rodada de manera magistral y sin dejar de perturbar al espectador, le dará la suficiente información a éste para que sepa cómo va a desarrollarse la historia sin equivocarse en lo más mínimo. He llegado a pensar que se ha hecho adrede para que como espectadora, al ser consciente del recorrido fatal por el que va a padecer nuestra protagonista pueda jugarse como un elemento con el que puede dotar de una mayor angustia y tensión, aportándose como un plus a lo que sucede más allá de la pantalla. En mi caso precisamente esa carta no se ha jugado bien.

Le hace perder toda la fuerza a la intensidad que en ocasiones con que se desea sorprender y no sientes la opresión atmosférica que intenta recrear. Ha sido como ver el truco de magia al inicio del número y estar siguiéndolo con el convencimiento de saber cómo el mago lo ha ejecutado.

Es una historia de pocos personajes donde Almudena Amor que interpreta a la protagonista, se me ha antojado que no soportaba del todo la presión de ser quien llevase el peso de la narración, especialmente en muchos momentos donde el ritmo es más pausado y especialmente cuando quien es su interlocutora, su abuela, no procede a responder, es decir, a darle la réplica en dicha escena. Me ha faltado fuerza y determinación en su interpretación. Todo lo contrario que su compañera de rodaje. Vera Valdez que interpreta a su abuela, ofreciéndonos una interpretación tan valiente como espeluznante por momentos. Hay momentos en los que no deja de provocarte cierto malestar con solo una risa. Su toque decrépito y vampiresco ha sido todo un acierto. El para mi tercer personaje en discordia, es el propio escenario prácticamente de toda la película que es el piso de la abuela. Plaza aprovecha cada una de las estancias dotando a la puesta en escena de un toque sobrio y minimalista pero muy inquietante.

 

Hubo algo durante el visionado, un guiño demasiado evidente que no supe entender hasta que vi los títulos de crédito y vi quien firmaba el guión de esta película, no siendo otro que Carlos Vermut. Ya pude entender todo y al saberlo analizando la historia se nota su buen hacer en las labores de escritura.  Eso sí, está basado en una idea del propio Paco Plaza.

Otro apunte más, esta vez en cuando a la duración. A veces una historia no tiene por qué llegar a una hora determinada para ser contada. Si tiene que ser en menos de 90 minutos, no le veo el inconveniente. Aquí hay un contraste evidente entre una primera mitad donde además de la escena inicial y la presentación de la vida de la nieta como modelo en Paris y de cómo se establece para que alguien puede ejercer de cuidadora y poder volver a su vida, a la segunda mitad donde ya vemos el desarrollo del cuidado de la abuela en el piso.

El ritmo pausado es inherente a toda la película pero se acentúa más en esa segunda mitad., llegando a repetir algunas escenas que podrían ser innecesarias por la poca aportación que tienen a la trama y a reiteración en sí. A veces menos, es más.

Plaza es hábil reinventándose ya que no solo es una historia de terror, logra hacer una mezcla que cohesiona perfectamente con una confluencia del costumbrismo con elementos fantásticos y a los que aporta algo de crítica social desde un segundo plano, acerca del tratamiento y cuidado de las personas mayores, además de como apartamos la mirada ante la vejez. Nos hace muestra de esa decrepitud de una manera cruda pero con una firma muy elegante.

En resumen, una película de terror diferente, donde el espectador podrá encontrar un mayor deleite en cómo nos cuenta la historia que la finalidad de la misma en sí. Paco Plaza vuelve a reiterarse una vez más como un director con una propuesta y visión más que interesante al que seguir.